martes, 19 de julio de 2011

Bases para una correcta Alimetación

Una alimentación saludable: Como humanos, comemos alimentos correspondientes a la escala evolutiva más alta. Esto constituye un gran error, ya que puede ocasionarnos problemas a nuestra salud por incompatibilidad. Lo ideal es tratar de consumir alimentos lo más lejos posible dentro de dicha escala. No se recomienda alimentos derivados de primates o mamíferos por ejemplo, y si nos conviene consumir vegetales, semillas, animales marinos, etc. Una dieta completa debe proporcionar los elementos nutritivos que se necesitan, además de prevenir enfermedades y curar las establecidas. Generalmente se dice que hay que comer una dieta variada para conseguir todos los
nutrientes necesarios. Estamos teniendo en cuenta a las frutas frescas de estación, verduras, ensaladas, cereales integrales, legumbres y algo de pescado y pollo. No se recomiendan productos lácteos, ya que estos pueden generar ciertas alergias por intolerancia a la lactosa. Se han verificado muchos casos de esta enfermedad. Hay que tener en cuenta de que más allá que los alimentos nos proporcionan nutrientes, agua y energía, se deben mantener ciertas recomendaciones para aprovecharlos al máximo. Los alimentos muchas veces sufren transformaciones en el procesado, tanto industrial como en los hogares. En el envasado, conservación y transporte se originan procesos químicos en su interior. De esta manera se puede pasar de un alimento saludable a otro distinto. Podemos citar a Hipócrates que sostenía que un alimento no solo debe aportar los nutrientes necesarios sino que debe ser capaz de restablecer nuestra deteriorada salud.

Limpieza y Conservación: La mayoría de los alimentos vegetales debe lavarse antes de su consumo, incluso los que tienen cascara. Esto es para evitar el contacto con microorganismos perjudiciales para nuestra salud. El alimento puede estar contaminado por el mismo contacto con el aire, porque se hayan posado insectos, pájaros o parásitos que pueden dejar excrementos. Posteriormente los alimentos pueden ser recolectados a mano o con maquinaria especial. Esto constituye otra fuente de contaminación. Si se trata de alimentos perecederos, pueden seguir dos vías distintas. Se pueden enviar a los mercados o ser conservados en cámaras especiales. En la primera opción tendrán que ser envasados, quizá al aire libre, en camiones y nuevamente depositados en otro gran mercado. Allí concurrirán cientos de personas, con vehículos contaminantes y hasta problemas de salud. Cuando llegan al mercado, vemos que es un lugar densamente concurrido, en donde es normal que se fume, se tosa, etc. Esto no termina aquí, ya que luego de meterlo en bolsas recorrerá varias calles y finalmente será depositado en la cocina. Suponiendo que el alimento no llegue rápido al consumidor hay que conservarlo industrialmente. Aquí entran en juego los aditivos, conservantes, estabilizantes, antioxidantes, etc. Por todo esto es recomendable lavarlos cuidadosamente antes de su consumo. 

Recomendaciones: Si sumergimos los vegetales en agua durante periodos cortos la perdida de nutrientes será menor que si los sumergimos por largo tiempo. Es preferible lavarlos cuando están enteros y no cortados, ya que en este último caso la perdida de nutrientes será mayor. Si tomamos los vegetales directamente de la huerta, bastara con el simple lavado superficial para quitarles la tierra que pueda haber quedado. Hay que tratar de no quitar la cascara externa de los vegetales y comerlos íntegramente ya que allí están concentradas la mayoría de las vitaminas. Si hay que quitarlos solo que sea la parte imprescindible. Los vegetales de hoja verde conservan las mejores propiedades en las hojas externas, las mas verdes y grandes. Las más internas tienen poca clorofila y son de esta manera menos nutritivas. Desgraciadamente el común de la gente desprecia las hojas externas tirándolas. Solamente hay que desechar las partes estropeadas, amarillentas o en mal estado. Si se desea almacenarlas, no se aconseja cortarlas, enteras se conservan mejor. Las frutas deben conservarse a temperatura ambiente. Muchas se adquieren algo verdes y asá maduran mejor. Algunas de las que más aguantan sin estropearse son: cítricos, manzanas, melones, etc 
(aproximadamente 7 días). Los plátanos, uvas, melocotones y ciruelas, se conservan algo menos. Las de menos duración son: Fresas, cerezas y los higos. Las hortalizas más resistentes son patatas y cebollas, ya que duran hasta varios meses en lugar seco. Las zanahorias, remolachas, rábanos y coles unas dos semanas. Después, coliflor, judías verdes, pepino, apio, pimientos verdes y tomates maduros pueden estar apenas 5 días. 

Cocinado: No se debe hacer: Cortar, raspar, trocear o lavar los alimentos en exceso. Poner mucha agua al cocinar. Calentar la comida varias veces. Tirar el agua de la cocción. Cocinar con temperatura muy elevada. Poner los sobrantes del frigorífico. Diferentes modos de cocinar: Los vegetales es recomendable cocinarlos con poco agua, pero con la suficiente para evitar que se quemen o se peguen. Hay que tener una buena tapa para impedir el escape de los aromas y vapores. Las hortalizas ponerlas con el agua hirviendo para reducir la perdida de vitaminas. Aunque es imposible impedir la perdida de la vitamina C y B. en las ollas a presión la pérdida es menor, se conserva más el sabor y se deteriora menos su aspecto. El método de cocer al vapor es quizá uno de los mejores ya que el agua nunca esta en contacto con los alimentos y se pierden muy pocos nutrientes. Se colocan las verduras en un cestillo perforado para que no toque el agua. Otro método suele ser con aceite, como al freír patatas o con menor cantidad. Cada vez es más usado el método por microondas por ser más limpio al generar muy poco humo, es rápido y se pierden muy pocos nutrientes.

1 comentario:

  1. Excelente tu propuesta y muy interesante. Te felicito y te estoy siguiendo. Espero que te pongas como seguidor de mi blog. Si te llega a ser útil también tengo un blog de física: http://elblogdelaprofesoradefisica.blogspot.com además del que ya conoces http://laprofedequimica.blogspot.com
    Un abrazo.
    Silvia

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